Antes del tratamiento de la superficie, el parquet mosaico es calibrado y lijado. Suelen utilizarse lijadoras de banda ancha especiales, cuyo ancho de trabajo se ajusta a las dimensiones de la pieza y que lijan en una sola pasada desde arriba y abajo. Los elementos fijados con alambre no deben ser desgarrados. El resultado es una parte inferior plana, una parte superior lista para barnizar y un grosor uniforme del elemento de parquet.